Voy a describir algo fundamental antes de empezar con el cuidado de nuestra piel: identificar nuestro tipo de piel. Conocerlo es básico a la hora de utilizar cualquier producto ya que según al tipo de piel al que vaya dirigido tendrá una composición u otra, es lógico, a una piel grasa no la vamos a aplicar el mismo tratamiento que a una piel seca, porque requieren cuidados diferentes. Mi piel, por ejemplo, es mixta, por eso cuando escojo un producto siempre me fijo en que sea específico para pieles mixtas.
Aquí os describo las principales características de los tipos más comunes, así os resultará más sencillo identificar la vuestra.
☺PIEL NORMAL:
Este es el tipo perfecto, una piel de aspecto sano, mate y sin imperfecciones, suave y lisa al tacto. Es la que suelen tener los niños.
☺PIEL SECA:
Esta es una piel sin brillo, con tendencia al enrojecimiento y a la descamación en algunas zonas por la falta de hidratación, es áspera y seca al tacto. Tiene mayor tendencia a las arrugas.
☺PIEL GRASA:
Hay un aumento de la secreción sebácea por eso se ven poros dilatados, imperfecciones y granitos, tiene una textura más gruesa. Cuidado! a pesar de la grasa pueden estar deshidratadas.
☺PIEL MIXTA:
Es una combinación de piel normal o seca en la zona de las mejillas y más grasa en la zona T (frente, nariz y barbilla) por eso brilla más que el resto del rostro.
☺PIEL SENSIBLE:
Esta es la que se enrojece con facilidad, y se suele irritar con productos perfumados y jabones. Para encontrar productos adecuados lo mejor es probarlos en la cara interna del brazo.
Tened en cuenta que no siempre es fácil identificarse con uno, incluso a veces podemos equivocarnos, si teneis alguna duda no dudéis en acudir a un esteticista profesional o a un dermatólogo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario